¿Cuál es el desafío?
Hacer algo radical en mi pelo. Teñírmelo de algún color.
¿De qué tienes miedo y por qué?
Miedo a sentir vergüenza, a no aceptar el cambio y no poder volver atrás. Miedo a fallar a los demás.
Ya desde pequeño me gustaba hacer cosas con mi pelo. Cuando eres pequeño poco te importan las cosas. Me echaba gomina de colores, me dejaba las greñas, mechas y hasta me puse alguna que otra rasta.
Sin embargo, el tiempo y las opiniones familiares (y una mentalidad fácilmente influenciable) hacen que las ganas se vayan mermando y, al final, la duda se convierte en un temor.
Empiezas a verlo como algo raro e incluso te sientes como un extraño si haces algo que no está bien visto por los demás.
Y, joder, eso sí está mal. Si no te sientes libre ni para pintarte el pelo apaga y vámonos.
¿Qué tal ha ido la experiencia?
Este desafío tiene algo de tiempo, un año más o menos. La peluquería a la que voy tantas veces sabían que siempre quería hacer algo radical pero nunca daba el salto.
Y fueron ellas quienes me empujaron a atreverme. Así que agradezco de todo corazón ese empujón que me dio el equipo de VeroniCarrion.
Además, me tiñeron el pelo 2 veces. La primera por error mío escogí un color rubio pollo bastante agresivo. Días después volvimos a teñirme y ya quedó mucho más blanco. Era lo que se pretendía.
Aunque sea una tontería teñirse el pelo, si se mira el trasfondo de la situación, volvía a sentirme el «rebelde» que siempre me consideraba de pequeño. Respetando toda opinión pero haciendo lo que realmente sentía que quería hacer.
Ahora siento que puedo hacerme el cambio que quiera y no me afecta lo que opinen los demás. Qué es, al fin y al cabo, el motivo del temor: el miedo a «fallar» a los demás.
Si hay algún cambio en tu pelo que quieras hacerte y no lo haces, ¡hazlo! Te guste el resultado o no serás una persona con mucho más coraje. Piensa que, muchas personas que te mirarán raro es porque dentro de sí mismas quieren hacerlo pero no se atreven 😉
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